A veces llega el momento de dejar que la historia siga su curso, que te brinde lo que lleva tiempo esperando darte. Cuando sabes lo que el mundo tiene reservado para ti, y te decides a recibirlo, la paz te inunda. Esa es tu historia, para la cual naciste.
Al fin y al cabo todo es cuestion de suerte. Tu no decides nada.
Animo a todos aquellos que nacieron con un sino aciago ;)
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