Tantas cosas se te vienen a la cabeza, tantos recuerdos, tantas imágenes. La noche se cubrió mágicamente de un frío muy parecido al que vivíamos cuando sólo nos separaban unos cuantos bloques. Volvieron las mismas bromas, y hasta las mismas manías. Parecía que no nos habíamos ido nunca.
Y sin embargo, habían pasado ya tres años desde que nos separamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario