Un huracán de aire fresco parece agitarme desde dentro. Qué gran cambio con una razón tan pequeña. Aunque si lo vemos desde dentro nos damos cuenta de que la razón es incluso demasiado para no haber experimentado dicho cambio mucho antes.
Independencia, comprensión, paz, libertad, optimismo, profesionalidad, ambición... esta es la amalgama de beneficios de dicho cambio, que se han empezado a notar desde el minuto 0. Sienta tan bien que a veces me pregunto por qué no llegué a hacerlo antes...
Y parece algo insignificante, pero es, como siempre, mucho más de lo que parece.
Me alegro de haber vivido mi pequeño infierno. De no haberlo hecho, no me sentiría como me siento ahora.
Y lo curioso de tener este cambio coincidiendo con el final de un año y el principio de otro... del 11...
Feliz Año Nuevo...